Tipos de vino blanco, ¿cuáles hay?

En España se producen muchos tipos de vinos blancos, y la gran mayoría tiene un carácter aromático muy marcado, pero algunos vinos destacan por lo afrutado de sus aromas, que nos transportan hasta la propia fruta cuando los olemos o los degustamos, como es el caso de los vinos blancos de Segura Viudas.

Los aromas y sabores afrutados se deben principalmente a las variedades de uva y a los métodos de elaboración del vino, ya que el término afrutado suele venir de los aromas primarios, y alguna vez de los secundarios o de fermentación.

Por lo general hablamos de vinos jóvenes y suaves, con un punto de dulzor, servidos en frío, de poca graduación (entre 11 y 13 grados), y con un color pálido o amarillento.

Tipos de vino blanco afrutado

Entrando en un territorio más subjetivo, y más en una tierra como España, donde tenemos muchas variedades de vino blanco, el carácter afrutado de un vino siempre está sujeto a opinión, no es una variedad de vino homologada como son los tintos, blancos, rosados o espumosos.

En cualquier caso, hacemos dos recomendaciones para todos aquellos que gusten de este tipo de vino:

• Segura Viudas Xarel·lo: Sabroso y aromático, el Xarel·lo se ha convertido en los últimos años en una de las variedades de moda que mejor representa la esencia de la región vitivinícola del Penedés. Color amarillo pajizo pálido, brillante y atractivo. Aroma intenso a fruta madura donde resalta la piña, el melocotón y la manzana. Presenta notas florales y un fondo anisado agradable. Tiene entrada golosa y sabrosa. Presenta una acidez larga que le aporta frescura y equilibrio. Persistente en boca y tiene un retrogusto afrutado de melocotón y piña.
• Segura Viudas Creu de Lavit: Color amarillo pajizo pálido y brillante. Aroma complejo y elegante donde predomina la fruta blanca madura (melón, pera) y tropical (piña) con un fondo floral y miel de flores (genista). Aparecen también las notas a madera (vainilla, coco) aportadas por la barrica nueva durante la fermentación y crianza, muy integradas con la fruta. En boca tiene una entrada suave, elegante y de gran finura con una acidez larga que le da frescura. Aparece también la fruta fresca (piña) bien integrada con las notas tostadas aportadas por la barrica. Tiene un final de boca fresco, sabroso y redondo.